Me llevarás en ti (2019)

Todos los pecados cometidos por una telenovela latinoamericana (o turca), los posee esta película…y algunos más.

Director: Iván Obando

Geraldine Zivic, Carlos Fernández, Mariana Fernández, Gonzalo Vivanco

Me llevarás en ti es una hermosa canción compuesta por Jorge Villamil, cuya versión más conocida es la interpretada por el dúo Garzón y Collazos. También es el título de una nueva película basada en las memorias de Gonzalo Mejía, pionero de la aviación en Colombia y productor de Bajo el cielo antioqueño, la película más importante (y una de las pocas que sobrevive) de la era silente del cine nacional.

Lo que podría haber sido un interesante trabajo biográfico sobre este “Howard Hughes a la colombiana”, termina siendo toda una decepción. Basada en el libro escrito por Iván Obando (quien es el director de esta adaptación cinematográfica) y publicado en el 2016, Me llevarás en ti se enfoca en el romance imposible mantenido por el empresario antioqueño con la joven condesa polaca Isolda Pruzinsky, a quien conoce en Roma en el año de 1906. El tratamiento de ese amor es cursi y edulcorado a más no poder, además que desplaza los aspectos más importantes en la vida de Mejía a un segundo plano.

Pero este es el menor de los errores de esta cinta. Me llevarás en ti comete todos los pecados de las telenovelas latinoamericanas, y es que esta película no se siente como un verdadero producto cinematográfico, sino como un producto televisivo proyectado en la gran pantalla. Basta nombrar algunos: un pésimo trabajo de edición, contaminado por algunas desafortunadas transiciones entre planos (un efecto kitsch que busca comunicar la idea de “película de época”); un diseño de vestuario correspondiente al contexto histórico, pero que se estropea con los peinados de latin lover de novela ochentera; desperdicio del uso de exteriores y de las locaciones con una profundidad de campo inexistente; una banda sonora molesta y exagerada; sobreactuaciones y manierismos que traspasan las fronteras del patetismo; errores en el manejo de los acentos por parte de los actores; redundancias (voz en off que repite lo mismo que aparece en los textos escritos); traducciones con subtítulos de términos hablados en otros idiomas como oui o achtung; errores de script (un invierno en Rusia sin nieve); recuentos en imágenes de cosas que acabamos de ver hace media hora (con las mismas imágenes); diálogos que harían sonrojar a Ricardo Arjona o a Paulo Coelho (“Lo importante no es hacia dónde vamos, sino de dónde venimos…del amor”) o que generan un efecto camp no intencionado:

  • “Tengo cáncer de mama”  
  • “¿Hay algo que se pueda hacer?”
  • “En esta época, no”

A estos pecados capitales se les suma reducir la producción de Bajo el cielo antioqueño, la conformación de Cine Colombia y la fundación de Avianca, a anécdotas efímeras sin importancia (cuando lo verdaderamente efímero es esa relación casi inexistente con la condesa); y hacer un uso descarado y excesivo de product placement, disfrazado como parte del recuento de los logros de Mejía. Eso sin contar con la presencia de un personaje vestido de marinero, que le da consejos de vida al protagonista y que en un giro supuestamente sorpresivo, termina siendo un amigo imaginario (¡¡!!).    

Si estuviéramos en la década de los cincuenta (una de las épocas más difíciles en la historia del cine colombiano), esta película hubiera sido un logro impresionante y un gran avance para nuestro cine. Pero en esta época, en la que el cine nacional nos ha entregado obras como La tierra y la sombra, El abrazo de la serpiente, La mujer del animal, Siembra, Anna o Pájaros de verano (las cuales nada tienen que envidiarle al cine extranjero de calidad), Me llevarás en ti se percibe como un atraso enorme e inexcusable. Parafraseando a Scorsese y a Coppola, hay películas que no son cine.     

Sobre André Didyme-Dôme 1633 artículos
André Didyme-Dome es psicólogo y magíster en Comunicación. Se desempeña como crítico de cine para la revista Rolling Stone en español y es docente en la Escuela Nacional de Cine; además, es director del cineclub de la librería Casa Tomada y conferencista en Ilustre. Su amor por el cine, la música pop y rock, la televisión y los cómics raya en la locura.

17 comentarios

  1. Que mala reseña. Pareciera que su intención, más que dar su opinión, es destruir la imagen de una buena producción y quienes la hicieron.
    Muy desafortunada y carente de profesionalismo. Afortunadamente su opinión es contraria al sentir de quien ha visto la película, lo que hace que su reseña sea más decepcionante aún que su decepción por el producto.

    • Mi opinión está argumentada y no tiene por qué coincidir con su opinión. Yo también vi la película y escribo lo que pienso. No entiendo por qué mi crítica es carente de profesionalismo.

    • El texto no es una reseña. Es un análisis crítico. Me gustaría que ud., Sebastián, diera los argumentos de por qué sería una buena producción. La crítica de André me parece válida, y me permite aprender más sobre cómo apreciar el cine.

      • Voy a dar dos posiciones respecto a la película.
        La mía, un lego en la crítica cinematográfica, pero que se deja impregnar de las emociones que transmite una película: Me emocionó la película, me presentó un personaje que como Gonzalo Mejía no conocía bien y que me llena de orgullo por ser compatriota mío. La historia de amor, que al fin y al cabo es el eje central de la película y que es el pretexto del director para darnos a conocer al personaje central, me pareció bien contada y la verdad me llevó a las lágrimas.
        La del periodista y opinador Oscar Ritoré, que dice lo siguiente sobre esta película:
        “Esta película rodada en España, Italia y Colombia se convierte en uno de los más importantes largometrajes que se hayan producido en el país… La película de Obando (su director) es una bocanada de aire fresco en medio de tantas narcopelículas. Esta por el contrario acaricia el corazón y hace sentir que vale la pena aportarle a un país donde la industria significa futuro. Todos esos detalles (los describe más ampliamente en su reseña) los rescata con una fotografía exquisita, un sonido puro y una imagen impecable… Este 24 de octubre la película verá la luz en 190 salas de cine del país y se convertirá seguramente en un éxito que le dirá al mundo del celuloide que vale la pena hacer cine que construya y que emocione.Vale la pena verla y llorar al final”.
        Tomado de https://www.las2orillas.co/la-pelicula-que-desnarcotiza-al-cine-colombiano-y-le-hace-un-homenaje-al-emprendimiento/
        Bueno, son opiniones válidas también, creo yo.

  2. El cine es como la música, si el gusto dependiera de los críticos nada se disfrutaría, afortunadamente lo que importa es la opinión de los espectadores que terminaban aplaudiendo una encantadora historia que se atrevió a cambiar la temática del Narco-cine colombiano, amigo haz hecho cine? el Director y equipo de trabajo define los textos y diálogos o usted los escribe mejor?. De cursi no tiene nada maravillosa historia.
    ¡Felicitaciones!

    • Es una lástima que esta crítica que aparentaba ir bien encaminada en un principio, con argumentos que parecían bien estructurados y que prometían una opinión centrada y profesional, se termine convirtiendo en una desafortunada opinión tan cursi como lo cursi que se menciona de la película…
      Usar términos como “latin lover de novela ochentera” entre otros, le restan valor al poder de una crítica bien argumentada, profesional y estructurada. La convierte más en una crítica de programa de televisión nacional cómo LA RED del canal caracol entre otros, pues pasó de ser la opinión aparentemente de un profesional, a la libre expresión de inconformidad de un usuario más, como muchos a los que no les pudo haber gustado la película me llevarás en ti.

      Para entender lo que escribió el usuario André, hay que partir del hecho que no es una crítica, solo es una expresión emocional de lo que para él representó este largometraje.
      No le gustó, está en su derecho y eso queda claro. Sobre todo tiene el derecho de expresarlo y publicarlo. No hay que ir más allá.

      Ahora bien, no se trata de criticar la opinión de un espectador común (André) que va a ver una película de fin de semana, espera una gran aventura y le salen con otra cosa.
      De hecho, por la forma de expresarse es comprensible su decepción.
      Sin embargo, los juicios de valor que emite son temerarios y en su mayoría peyorativos, subjetivos y de percepción personal. Nada que ver con una crítica profesional. Lo cual es de leer con mayor indulgencia pues sus palabras simplemente dejan ver entre líneas que sus gustos difieren a lo que Me llevarás en ti ofrece: romance (lo cual considera cursi), historia, emocionalidad, etc…
      Por tratarse de cuestión de gustos, podría decir aquí que obviamente diferimos en la opinión que da sobre el largometraje de OBANDO y que si bien André considera producciones de calidad como: La tierra y la sombra, El abrazo de la serpiente, La mujer del animal, Siembra, Anna o Pájaros de verano (le faltó la vendedora de rosas) a mí modo de ver y lo diré en los términos de André, son absolutamente aburridas, lentas, desafortunadas y sin sentido, que pueden gozar de elementos cinematográficos bien logrados pero que como diría mi abuelo, “ABURREN UN PAYASO” pero quién soy yo para referirme en esos términos al trabajo y el esfuerzo de quienes han invertido su tiempo, su dinero y su talento en producciones que en lo personal no me gustaron?

      En conclusión, lanzo este comentario así como André, solo con el ánimo de expresar una opinión de otra opinión. No es una crítica a la intención de crítica de André; ni una réplica a la respetable percepción personal que tiene André de una película que en mi opinión, también respetable, con sus errores, logró conmoverme y conmover al público que se encontraba a mi al rededor.
      Lo cierto es que me emocionó mucho más que otras producciones nacionales o internacionales que son reconocidas por los verdaderos críticos. Por lo tanto, mi opinión general de la película paisa, es positiva.
      Expresó mi agradecimiento como colombiano por invertir en una producción que si bien puede parecer una telenovela en la pantalla grande, es una excelente iniciativa apostar a contar historias y mostrar una Colombia que no solo constituye su escencia en selvas, narcotraficantes, modelos, indígenas, afrodescendientes y pobreza.

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*