Director: Billy Wilder
Marilyn Monroe, Jack Lemmon, Tony Curtis, Joe E. Brown
Esta cinta, dirigida por el gran Billy Wilder, es una de las más más claras evidencias del irresistible encanto del cine.
Dirigida de una manera experta y tremendamente entretenida de principio a fin, Some Like it Hot es, quizás, la mejor comedia romántica de enredos de todos los tiempos. En ella, Jerry y Joe, dos músicos procedentes de Chicago (Jack Lemmon y Tony Curtis), se disfrazan como mujeres para evitar ser asesinados, ya que fueron testigos de la “Masacre del día de San Valentín”, llevada a cabo por la mafia.
Vestidos como mujeres, los músicos se unen a una orquesta femenina bajo los nombres de Josephine y Daphne, y se embarcan en un viaje hacia La Florida. Allí conocen y se hacen amigos de la cantante Sugar Kane (interpretada por Marilyn Monroe, en el mejor papel de su carrera), quien sueña con casarse con un millonario. Joe siente una gran atracción por Kane y se disfraza como un millonario (imitando a Cary Grant) para seducirla, mientras que Jerry es perseguido por un millonario (Joe E. Brown), quien se siente muy atraído por su versión femenina.
Aquí, el sexo se transforma en amor, el interés material se convierte en interés afectivo y las barreras de los sexos se traspasan. Some Like It Hot es una de las mejores películas en la historia del cine, Marilyn Monroe exuda sexo por cada uno de sus poros, y Tony Curtis y Jack Lemmon no pueden estar mejor. Además, incluye también uno de los mejores finales en la historia del cine.
¿Qué más se le puede pedir a una película?
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