Una alocada comedia sexual de adolescentes desarrollada desde una perspectiva femenina.
Dirección: Kay Cannon
Leslie Mann, John Cena, Ike Barinholtz, Kathryn Newton, Gideon Adlon, Geraldine Viswanathan
Las comedias para adolescentes (las cuales tuvieron su punto álgido en la década de los 80) son la oportunidad perfecta para abordar los tabúes de la sociedad en cuanto a la sexualidad y al consumo de drogas. Sin embargo, muy pocas veces (o casi nunca) se había hecho una película de este tipo, que fuera realmente graciosa y que girara alrededor del despertar sexual femenino…hasta ahora.
Blockers cuenta la historia de tres chicas llamadas Julie (Kathryn Newton), Kayla (Geraldine Viswanathan) y Sam (Gideon Adlon), amigas desde la infancia, quienes faltando unos pocos días para su graduación, realizan un pacto sexual para perder cada una su virginidad el día de su prom. Por un descuido por parte de Julie, Lisa (Leslie Mann), la madre soltera y sobreprotectora de esta, descubre el plan de las tres y se une a Mitchell (John Cena), el torpe e hipersensible padre de Sam y a Hunter (Ike Barinholtz), el padre divorciado de Sam y de espíritu más relajado, para impedir a toda costa el cumplimiento del pacto realizado por sus hijas.
La directora debutante Kay Cannon (quien ha trabajado como guionista para la serie de televisión 30 Rock y para las películas de Pitch Perfect), logra un trabajo muy gracioso, que saca lo mejor de sus actores y que cuestiona la hipocresía y el machismo inherente al interior de la sexualidad humana. Leslie Mann (The 40 Year Old Virgin, This is 40) se convierte en el centro de esta comedia, evidenciando los temores y el instinto protector de Lisa; Ike Barinholtz (Neighbors, The Disaster Artist) muestra la confusión, la frustración y los intentos por redimirse con su hija distante y el ex-luchador John Cena continúa demostrando su inmenso talento para la comedia (Trainwreck, Sisters) interpretando a un hombre que sigue viendo a su hija como una pequeña damisela en peligro que debe ser rescatada de las garras de esos muchachos de pelo largo, acné y hormonas enfurecidas.
Pese al mensaje y al abordaje de las tumultuosas relaciones entre padres e hijos, Blockers está llena de momentos políticamente incorrectos que la colocan en el cuestionable panteón de cintas «clásicas» del género como Porky’s, The Last American Virgin o American Pie. Dentro de estos, se pueden destacar la ingesta de cerveza vía anal, un juego erótico al mejor estilo de «la gallina ciega», la explosión de vómito masivo al interior de una limusina y el uso de emoticones por parte de los adolescentes, cuyo doble sentido impresionaría al mismísimo Robert Langdon.
Blockers logra un perfecto equilibrio entre la humanidad de sus personajes y la comedia sexual disparatada. Pero es la mirada femenina que nunca llega a convertir a la mujer adolescente en objeto sexual o en víctima del deseo masculino, la que le otorga su poder y valor a esta cinta de entretenimiento ligero.