Una cinta hermosa y a la vez muy triste, sobre una mujer que vive en las calles y un niño inmigrante que busca a su madre.
Director: Claus Drexel
Catherine Frot, Mahamadou Yaffa
Claus Drexel es un director de origen alemán, pero con un cine muy francés, quien en el 2013 realizó un documental llamado En el borde del mundo, una aproximación a la vida triste y oscura de los habitantes de las calles de un país europeo, donde él vive en condición de inmigrante.
La estupenda actriz Catherine Frot (Marguerite, Alta cocina, Un aire de familia), quedó cautivada con el documental y se contactó con el director para llevar la tragedia de las personas sin hogar al terreno del argumental. Esto dio como resultado la entrañable Bajo las estrellas de París.
Esta cinta dirigida por Drexel y protagonizada por Frot, está inspirada en Christine, una de las mujeres indigentes de En el borde del mundo. Esta mujer que deambula por las calles parisinas, una noche se encuentra en el agujero junto al río Sena donde duerme, con Suli (interpretado maravillosamente por Mahamadou Yaffa) un pequeño niño inmigrante, que no habla francés y que ha perdido a su mamá. Al principio, Christine rechaza a Suli, pero poco a poco, ella se convierte en una figura protectora, que emprende la difícil misión de hallar a la madre del niño.
Es indudable la relación que esta cinta tiene con The Kid, el clásico de Charles Chaplin, como también de las películas Estación central de Walter Salles y Tsotsi, de Gavin Hood, donde se nos muestra cómo la sociedad contemporánea va en detrimento de la dignidad y la humanidad de aquellos que, al no poseer dinero ni bienes materiales, quedan marginados de la sociedad.
Sin discursos edulcorados y sin caer en el melodrama, Bajo las estrellas de París es una digna heredera del realismo poético francés, que busca encontrar la belleza, así como la verdad, en los lugares y las situaciones más duras y terribles.
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