Un comediante de stand-up se une a uno de los más grandes actores de la historia, para protagonizar una comedia ligera, pero con corazón.
Directora: Laura Terruso
Sebastian Maniscalco, Robert De Niro, Leslie Bibb, Kim Cattrall, David Rasche
En los últimos años Robert De Niro, el protagonista de los clásicos El padrino 2, Toro salvaje, Taxi Driver, El francotirador y Buenos muchachos, se ha decantado por el terreno de las comedias ligeras. En este campo, De Niro ha logrado muy buenos trabajos como Fuga a la medianoche, Cortina de humo, Analízame y La familia de mi novia. Pero también es cierto que este prestigioso actor ha generado vergüenza ajena con unos títulos francamente deplorables como Mi abuelo es un peligro y En guerra con mi abuelo, muchísimo peores que la terrible adaptación en acción real de la serie animada Rocky la ardilla voladora y Bullwinkle.
Es así que con el estreno de un título como Mi papá es un peligro, los seguidores del actor bien pueden prepararse para lo peor. Sin embargo, la cinta dirigida por Laura Terruso (Work It: Al ritmo de los sueños), aunque no llega a equipararse a los mejores trabajos cómicos de De Niro, es una cinta divertida y con corazón.
Este trabajo, coescrito y protagonizado por el comediante de stand-up Sebastian Maniscalco (supuestamente basado en sus propias experiencias), intenta ser la versión italoamericana de Mi gran boda griega y la verdad es que no lo logra, pero sí logra explotar el talento de De Niro.
La trama es recalcitrante y plagada de lugares comunes: Una pareja conformada por Sebastian Maniscalco (el actor utiliza su mismo nombre), el hijo de un inmigrante italiano que trabaja en un hotel, y Ellie Collins (Leslie Bibb), una pintora hija de una familia acaudalada que hace parte de la industria hotelera, deciden contraer matrimonio. El padre de Sebastian es Salvo (DeNiro), un peluquero hosco, terco y trabajador, que perdió recientemente a su esposa y que adora a su hijo. Este decide ir con él a visitar a la familia de Ellie por un fin de semana para comunicar la noticia. Sobra decir que los Maniscalco y los Collins proceden de mundos opuestos. Hasta aquí, la premisa inicial nos indica que estamos ante una mala copia de La familia de mi novia con toques de Mi abuelo es un peligro.
La familia Collins es algo así como la versión ligera de los Roy de la serie Succession. Por un lado, tenemos a los hermanos Lucky (Anders Holm), todo un imbécil arribista con todo y saco amarrado en el cuello; y Doug (Brett Dier), otro imbécil dedicado a la sanación espiritual con todo y vasijas curativas. Por otro lado, están los padres de Ellie, quienes son Tigger (una adorable Kim Cattrall), una aguerrida mujer dedicada a la vida política y Bill (David Rasche de Succession), el amable y diplomático heredero de la cadena de hoteles.
Hay momentos genuinamente cómicos que incluyen a los Maniscalco realizando su ritual nocturno de colonias, a Sebastian perdiendo su vestido de baño frente a los padres de Ellie, y un corte de cabello a Tigger realizado por Salvo que, en un principio, aparenta ser desastroso. A esto se le añaden momentos de verdadera ternura que permiten que los personajes no se queden en meras caricaturas estereotipadas.
Al final, Mi padre es un peligro termina siendo una comedia ligera y agradable que gira en torno a De Niro y a esa auto parodia suya que él ha sabido manejar con destreza en el campo de las comedias familiares, pero que pudo haber sido algo mucho mejor.
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