Alisten sus pokebolas para atrapar a uno de los personajes más tiernos y peluditos de la cultura popular. ¡Es una lástima que su película no llegue a ser tan entretenida como los videojuegos en los que se basa!
Dirección: Rob Letterman
Justice Smith, Ryan Reynolds, Kathryn Newton, Bill Nighy, Ken Watanabe
Probablemente los fanáticos de Pokémon no se molestarán en leer esta crítica y correrán a las salas de cine a ver esta película a como dé lugar. Pero para aquellos que saben poco o nada de un fenómeno de la cultura popular que se niega a morir, aquí va una breve contextualización.
A diferencia de muchos animes (dibujos animados japoneses), los cuales originalmente provienen de mangas (cómics japoneses), Pokémon fue primero un reconocido y divertido videojuego que incluía los personajes creados por Satoshi Tajiri, un hombre que cuando era niño estaba obsesionado con coleccionar insectos.
En vez de ser entomólogo, Tajiri fusionó su afición con el diseño de videojuegos y el resultado fue Pokémon (abreviatura de Pocket Monsters o Monstruos de bolsillo), en donde el jugador debe capturar y entrenar a una gran cantidad de criaturas con formas y habilidades diferentes. Las ventas millonarias del videojuego llevaron a una famosísima serie para la televisión, un juego de cartas coleccionable, varias series de cómics y diecinueve películas animadas para cine y vídeo.
Veinte años después de la creación del juego original, salió al mercado la aplicación para dispositivos móviles Pokémon GO, que revivió con una fuerza descomunal a la franquicia, generando un fenómeno viral a nivel mundial. Es por esta razón, que los estudios Warner decidieron realizar la primera película en acción real (y obviamente una gran cantidad de efectos digitales) inspirada en Pokémon, enfatizando en el éxito de GO. Aunque la verdad sea dicha, su estreno es algo trasnochado teniendo en cuenta que la fiebre por la aplicación prácticamente se ha desvanecido.
Pokémon: Detective Pikachu se desarrolla en Ryme City, una megalópolis que ha aprendido a convivir con esas criaturas: algunas tiernas, otras graciosas y una que otra peligrosa. El personaje de Ash Ketchum, protagonista de las series, cómics y películas animadas, es reemplazado por Tim Goodman (Justice Smith de la serie The Get Down), el hijo de un policía, el cual ha desaparecido y se le presume muerto.
Es así que Tim emprende la misión de averiguar el misterio de su padre y para ello cuenta con la ayuda de Pikachu, el Pokémon más reconocido (y también el más tierno) de los casi mil que existen. Esta criatura pequeña, peluda y amarilla con poderes eléctricos era el compañero y asistente del padre de Tim, pero ha perdido la memoria. Menos mal que Tim puede hablar perfectamente con Pikachu, ya que para los demás este solo emite los vocablos “Pika-Pika”, recurso que sirve para que Ryan Reynolds (el actor de Deadpool), pueda darle gracia y picardía con su voz a la criatura.
La investigación llevada a cabo por Tim y Pikachu, los lleva a aliarse con una joven reportera llamada Lucy Stevens (Kathryn Newton de Blockers), a descubrir una peligrosa sustancia que enloquece a los Pokémon, y a sospechar de Roger Clifford (Chris Geere), el jefe de Lucy e hijo de Howard Clifford, el magnate y defensor de los Pokémon (Bill Nighy), como la persona detrás de una conspiración que incluye a Mewtwo, el Pokémon más poderoso de todos.
Los espectadores ajenos a este universo se van a sentir alienados y confundidos con todo lo que sucede en la película, y más si a la investigación detectivesca se le incluye los famosos enfrentamientos entre Pokemones de los orígenes de la franquicia. El director Rob Letterman, autor de las cintas animadas El espantatiburones, Monsters Vs. Aliens y las cintas de acción real Los viajes de Gulliver y Escalofríos (ambas protagonizadas por Jack Black), intenta fusionar el universo caricaturesco y neo-noir de ¿Quién engañó a Roger Rabbit? con la trama antropomórfica y detectivesca de Zootopia. El resultado es un caos, que en algunos momentos entretiene, pero que en la mayoría del tiempo termina exasperando.
Puede que al poke-fanático, esta película le parezca toda una obra maestra, pero al tomar distancia se puede concluir que el resultado es mediocre y abrumador. Y es que lo mejor de Pokémon es y serán sus videojuegos. En esto, tanto los fanáticos como los que no, estaremos de acuerdo.