Gillian Anderson y Lily James intentan ponerse en los zapatos de Bette Davis y Anne Baxter, en la adaptación teatral de un clásico de Hollywood.
Realizar la adaptación de un clásico del cine (así sea para el teatro) puede convertirse en una tarea tan imposible como innecesaria. All About Eve, la inmortal cinta de Joseph L. Mankiewicz de 1950, además de tener la mejor actuación en la carrera de Bette Davis, es toda una lección magistral de cómo se debe hacer un guion cinematográfico y un magnífico homenaje (y, a la vez, sátira) sobre el mundo del teatro y sobre el oficio de la actuación. De aquí surge la pregunta: ¿para qué volverla a hacer?
El reconocido director teatral Ivo Van Hove (A View From The Bridge, Obsession) busca actualizar un relato que no necesita ser actualizado (la historia de una actriz madura que es gradualmente reemplazada por una ambiciosa actriz joven en ascenso). Según él, su adaptación se basa en el guion escrito por el mismo Mankiewicz y no en la película como tal. Pero, ¿es realmente así?
La actriz Gillian Anderson (conocida por la popular serie de televisión The X-Files) interpreta a Margo Channing, la actriz que no acepta el paso de la edad y que se ve reemplazada por Eve Harrington, una colega mucho más joven que ella y con actitud de “mosquita muerta” (Lily James, conocida por la serie Downton Abbey). Las dos actrices, aunque logran asumir con profesionalismo sus papeles, caen en el error de imitar el acento y las gesticulaciones de las actrices de la película original (Bette Davis y Anne Baxter, respectivamente). Y aunque al parecer el tiempo en el que se desarrolla la obra de Van Hove es el presente, el ambiente del teatro en el que se desenvuelven parece extraído de los años cincuenta. Hoy en día, hubiera sido mucho mejor para una actualización efectiva de la obra en cuestión, haber utilizado en mundo del cine o el de la televisión.
Van Hove hace uso de pantallas gigantes para generar acciones simultáneas paralelas en el escenario teatral y para explotar la expresión de sus actores, pero eso es lo único realmente novedoso que muestra la adaptación teatral de All About Eve. El resultado es una imitación inferior al clásico de Hollywood (considerada como una de las mejores películas de todos los tiempos), que carece de la belleza, el ingenio y la fuerza de su predecesora.