El productor de las comedias inteligentes Master Of None, The Good Place y Parks And Recreation, nos ofrece un impresionante debut como director, con una historia basada en las experiencias como inmigrante de su padre.
Director: Alan Yang
Tzi Ma, Hong Chi-Le, Christine Mo, Joan Chen, Yo-Hsing Fan, Fiona Fu
El director y guionista Alan Yang, productor de las magníficas comedias Parks And Recreation, The Good Place y Master Of None, debuta como director con el largometraje para Netflix Tigertail, un trabajo pausado, de una profunda tristeza y basado libremente en las experiencias de su padre como inmigrante.
La historia de Tigertail (título que hace referencia a la calle donde vivía su protagonista) es la siguiente: Pin-Jui (Tzi Ma) es un hombre maduro y reservado nacido en Taiwán, que vive en Nueva York. Pin-Jui está divorciado y sus dos hijos ya no viven con él. Por medio de flashbacks conoceremos sobre su vida.
Cuando era pequeño, Pin-Jui fue criado por su abuela en un ambiente rural, y allí tenía visiones sobre su padre muerto y se escondía de los soldados que buscaban a ciudadanos ilegales. La vida del niño fue alegrada por la compañía de Yuan, una chica a la que conoció en el campo. Ya adolescente, Pin-Jui (Hong Chi-Lee) pasa a vivir con su madre, para trabajar junto a ella en una fábrica local. La amistad entre Pin-Jui y Yuan (Yo-Hsing Fang) se convierte en romance, y los dos suelen bailar en un bar y escaparse sin pagar luego de cenar en un restaurante elegante.
Sin embargo, el jefe de la fábrica donde trabaja le ofrece la oportunidad de salir de la miseria: Pin-Jui podrá viajar a los Estados Unidos si contrae matrimonio con Zhenzhen, la hija de su jefe y con la que no tiene nada en común (como ella lo reconocerá más adelante). Es así, que Pin-Jui toma la decisión de dejar al amor de su vida para tener una vida mejor. Pero, ¿fue realmente así?
La cinta de Yang le presta mucha atención a los silencios y a los detalles. Asimismo, se toma su tiempo para meternos en la vida de este inmigrante que no sabe cómo hablarle a su hija y que continúa su vida en inercia luego de perder a su esposa y a su madre (la cual se quedó toda su vida en Taiwán).
Esta película en apariencia sencilla, pero que revela una gran sensibilidad y belleza, nos recuerda lo mejor del cine de Wong Kar-Wai y Zhang Yimou, especialmente con su final, en el que Pin-Jui intenta conectarse con su hija, quien también quedó sola luego que su prometido la abandonara. Es simplemente devastador.
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