Una película de horror sobre con algunos toques lyncheanos y varios momentos genuinamente perturbadores.
Director: Romola Garai
Alec Secareanu, Carla Juri, Imelda Staunton, Angeliki Papoulia
El protagonista de Amulet es Tomas (interpretado por el actor rumano Alec Secareanu), un soldado encargado de cuidar la frontera de un país en guerra sin nombre, en una cabina ubicada en medio de un bosque nublado, oscuro y solitario. Es allí donde Tomas se encuentra a Miriam (encarnada por la actriz griega Angeliki Papoulia), una refugiada que encuentra asilo con el soldado. La mujer se ha encontrado una misteriosa estatuilla enterrada cerca a la cabina y este es el amuleto que le da nombre a la película.
Ahora estamos en el presente y Tomas es un inmigrante que vive en Londres en un refugio y quien trabaja como obrero. Luego de un incendio, Tomas es acogido por una monja caritativa (la gran Imelda Staunton), que invita al hombre a una casa en ruinas. En dicho lugar vive una joven llamada Magda (Carla Juri), encargada de cuidar a su madre quien, al parecer, se encuentra muy enferma y le quedan pocos días de vida.
La idea es que Tomas ayude con las reparaciones de la casa y en retribución, Magda le dará cama y comida. Pero en la ópera prima como directora de la actriz británica Romola Garai, nada es lo que aparenta. La estupenda fotografía de Laura Bellingham nos guiará a una casa donde un extraño murciélago albino reposa en la taza del baño y una madre encerrada en una habitación decadente se queja y se retuerce en medio de sus propios desechos (las directoras de arte Francesca Massariol, Lucy Gahagan y Sofia Stocco merecen reconocimiento por actualizar los escenarios macabros de los cortos de David Lynch y de su largometraje Eraserhead).
Aunque la cinta logra ponernos la carne de gallina y se incluyen varios momentos genuinamente perturbadores y aterradores, lo cierto es que Garai no logra el nivel de tensión y la fluidez orgánica de los trabajos de Lynch, y al final nos quedaremos con la sensación de que detrás de la historia sobre demonios, amuletos y hombres abusadores que reciben un cruento castigo, hay muy poca coherencia.
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