La segunda película de terror de Alfred Hitchcock, luego de Psicosis incluye altas dosis de adrenalina y psicoanálisis freudiano por partes iguales.
Dirección: Alfred Hitchcock
Tippi Hedren, Rod Taylor, Suzanne Pleshette, Veronica Cartwright, Jessica Tandy
A lo largo de su carrera, el maestro del suspenso realizó dos películas que se pueden considerar de terror: Psicosis y Los pájaros. Curiosamente, es la segunda la que se presta a una mayor cantidad de interpretaciones psicoanalíticas.
El filósofo Slavoj Žižek resalta el simbolismo fálico de las aves en esta película de Hitchcock. Los pájaros en cuestión,
los cuales inexplicablemente deciden atacar a los habitantes de un pueblo costero, pueden representar el desenfrenado deseo sexual del exitoso abogado Mitch Brenner (Rod Taylor), hacia Melanie Daniels (Tippi Hedren), la hija consentida de un magnate.
Curiosamente, Mitch no corteja a Melanie como se acostumbra. En vez de regalarle flores (el órgano reproductor de la planta), Melanie corteja a Mitch utilizando un par de periquitos australianos. Asimismo, ella también busca apartarlo de Lydia (Jessica Tandy), la madre de Mitch, y de la maestra Annie Hayworth (Suzanne Pleshette), quienes compiten por el amor del hombre. Aquí cabe una interpretación misógina sobre los pájaros enloquecidos de Hitchcock, ya que ellos podrían representar a ese trío de mujeres que rivalizan de manera salvaje por Mitch, el único macho del grupo.
También podría pensarse en las aves que atacan a Melanie, como la proyección de la agresividad reprimida por parte de la sobreprotectora Lydia, generada por unos celos de carácter edípico. Si el falo representa poder, deseo e intimidación, lo cierto es que los pájaros que se salen de control en la película de Hitchcock, condensan y representan de una manera deliciosamente perversa esas tres características, además de resaltar el caos causado por las emociones humanas.
De todas maneras, nunca se llega a explicar por qué los pájaros deciden atacar a los habitantes de Bodega Bay y es mejor que sea así. La explicación sobre las acciones de Norman Bates en Psicosis, constituye una mancha que casi llega a opacar al clásico de Hitchcock. De hecho, el director siempre evitó discutir sobre los subtextos de sus películas, y de ahí gran parte del encanto de las mismas.
Los pájaros fue la tercera película del director basada en una obra de Daphne Du Maurier (Jamaica Inn y Rebecca son las otras). Los efectos especiales, que combinaron pájaros mecánicos con aves reales, junto con la música electrónica de Bernard Herrmann (compositor de la música de Psicosis), quien mezcla con inteligencia sonidos disonantes con graznidos, hacen que la cinta de Hitchcock logre equilibrar la ambigüedad que da para múltiples interpretaciones, con unas altas dosis de terror visceral muy bien orquestadas.