Una película que evidencia todo lo que está mal con las películas de terror.
Director: Ryan Simons
Darren Day, Robert Hamilton, Liam Fox, Kate James, Ellie Goffe, Jimmy Allen, Alannah Marie
Ojo del demonio es una película británica de terror dirigida por Ryan Simons (Seizure) y está inspirada en la leyenda de la bruja de Saddleworth, cuyos orígenes se remontan al año de 1850, además de incorporar a la criatura mítica conocida como Padfoot, una bestia que habita en la oscuridad.
Sin embargo, la trama de la cinta de Simons se desarrolla en la actualidad. Una joven llamada Sadie (Kate James) regresa a la casa de su padre ubicada en Moors (lugar también infame por el asesinato de cuatro personas en los años sesenta). John (Darren Day), el padre de Sadie, era un periodista que trabajaba para un periódico sensacionalista, que se suicidó ahorcándose en su casa, bajo circunstancias misteriosas.
Sadie termina viviendo en su casa de infancia y consigue trabajo como fotógrafa en el periódico. Allí también trabaja Dan (Robert Hamilton), un periodista al que no le gusta su trabajo y quien, al parecer, no está muy convencido de su compromiso amoroso con su colega Faye (Ellie Goffe).
Al continuar con la investigación de su padre, Sadie descubre un amuleto conocido como el Ojo del demonio, el cual está conectado con la bruja de Saddleworth, quien fuera acusada de bruja por los habitantes del poblado. A la bruja en cuestión le sacaron los ojos y fue quemada en la hoguera junto con su perro Padfoot. Según la leyenda, el amuleto cumplirá todos los deseos de quien lo posea, pero hay un precio a pagar: el portador será perseguido por dos espectros sobrenaturales, que son el fantasma de la bruja (la chica ardiente) y el fantasma de Padfoot.
Esta es la interesante historia de una película cuyas actuaciones son terribles (hay mejor calidad actoral en una película porno), los personajes carecen de cualquier tipo de carisma, está llena de situaciones ilógicas y estereotipadas y, lo que es peor, no llega a asustar en ningún momento. Quedan advertidos.
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