Director: Roger Allers, Rob Minkoff
Con las voces de Matthew Broderick, Jeremy Irons, James Earl Jones, Whoopi Goldberg, Robert Guillaume, Moira Kelly, Jonathan Taylor Thomas
Después de la versión de Sir Laurence Olivier, esta es quizás la segunda mejor adaptación de Hamlet en la historia del cine.
En 2D o en su nueva versión en 3D, The Lion King es y seguirá siendo un clásico de la animación que todo el mundo debería ver. Como parte de la “resurrección de Disney”, que se inició con The Little Mermaid y que continuó con Beauty And The Beast, esta cinta animada acerca de un joven león llamado Simba (con la voz de Jonathan Taylor Thomas como niño y Matthew Broderick como adulto), destinado a ser el rey de la selva, y quien es traicionado por su cruento tío Scar, goza de una hermosa banda sonora a cargo de Elton John y del preciosismo y la carga emocional característica de los clásicos del estudio (la muerte del padre de Simba es uno de los momentos más tristes en la historia del séptimo arte).
Sin embargo, El Rey León toma mucho (quizás demasiado) del manga y la serie anime de los años 60, creada por el maestro Osamu Tezuka y llamada Jungle Taitei (Kimba, El león blanco) sin otorgar ningún tipo de crédito. De todas maneras, muchos de los personajes creados por Tezuka (como el icónico Astroboy), nacieron de la inspiración de Disney.
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