Byeonshin (Metamorphosis) (Los rostros del diablo) (2019)

Aunque esta película coreana no tiene la calidad de las obras maestras de Park-Chan Wook o Bon Joon-Ho, sí posee un gran poder para estremecer al espectador, gracias a unas situaciones extremadamente perturbadoras.  

Director: Hong-Seon Kim

Sung-Woo Bae, Dong-il Sung, Young-nam Jang

Gracias al éxito y a los premios obtenidos por Parásito, la obra maestra de Bong Joon-Ho, el cine coreano está de moda en occidente. Sin embargo, Corea del Sur mantiene una larga tradición de películas de excelente calidad. Basta con ver las películas de Park Chan-Wook (Oldboy, La doncella), Kim Ki-Duk (Hierro 3, El arco), Kim Ji-Woon (Yo ví al diablo, El Bueno el malo y el raro), o las otras obras maestras de Bong Joon-Ho (Memories Of Murder, The Host), para darse cuenta de que el cine más innovador, transgresor, poético y cautivador, lleva años haciéndose en Corea del Sur.

Puede ser que la cinta Los rostros del diablo, del director Hong Seon-Kim, esté muy lejos en términos de calidad con respecto a Parásito y Old Boy, y tampoco cumple con los estándares obtenidos por las estupendas cintas de terror como Historia de dos hermanas de Kim Ji-Woon o Tren a Busan de Yeon Sang-Ho. Pero nadie puede negar su poder para perturbar y aterrar al espectador.   

Los rostros del diablo pertenece a las películas sobre exorcismos, el cual es un género muy popular en Corea del Sur, con cintas como Los sacerdotes, En presencia del diablo, La furia divina, El elegido, La casa de los desaparecidos, Los guardianes de las almas y su premisa sigue al pie la estructura narrativa típica de este tipo de trabajos que le deben mucho al clásico de William Friedkin: el demonio invade el seno de una familia y un sacerdote que vive una crisis de fe, debe expulsar a esa poderosa entidad de los cuerpos humanos indefensos que posee.

Aquí, Bae Sung-Woo interpreta a Jong-Soo, un cura que piensa en retirarse (o al menos abandonar Corea para viajar como misionero), luego de practicar un exorcismo que terminó con el suicidio de una joven poseída por un demonio que juró vengarse de él y de su familia. La familia en cuestión está conformada por Gang-Goo (Sung Dong-il), hermano del sacerdote, esposo y padre; su esposa Myung-Joo (Jang Young-nam); y sus tres hijos: La mayor Son-Woo (Hye Jun-Kim), la chica del medio Hyun-Joo (Yi-Hyun Cho), y el pequeño Woo-jung (Kim Kang-Hoon).

Los cinco acaban de trasladarse a un nuevo vecindario, sienten vergüenza por los hechos ocurridos en el exorcismo y deben enfrentarse a un extraño vecino que tiene la macabra costumbre de dejar gatos muertos en las casas ajenas, así como destripar animales y colgarlos en su casa, junto con cruces al revés y otros tipos de parafernalias satánicas.

Es así que, utilizando como canalizador al vecino de hábitos siniestros, el demonio que poseyó y mató a la chica del fatídico exorcismo llevado a cabo por Jong-Soo, entra en el seno de su familia, y se hace pasar por cada uno de los miembros de la misma, introduciendo de una manera gradual, conductas de maldad y perversión (el demonio se convierte en el padre e intenta abusar sexualmente de una de sus hijas, luego se convierte en una madre que devora su desayuno como si fuera un animal salvaje e insulta a su hijo pequeño, para después convertirse en una de las hijas, la cual espía a su hermana mientras esta se baña).

Cuando la familia se da cuenta de lo que sucede, pide ayuda al sacerdote y este, a su vez, solicita la ayuda de sus superiores. Lo que sigue es una serie de sucesos que van en contra de toda lógica y que le restan verosimilitud a la cinta. Pero, si el objetivo de una cinta de terror es generar taquicardia, sudor frío e hiperventilación, para luego causar insomnio debido a unas imágenes perturbadoras que quedarán pegadas de  forma indeleble en la mente del espectador, entonces esta película es todo un logro para el género. Quedan advertidos.     

  

Sobre André Didyme-Dôme 1649 artículos
André Didyme-Dome es psicoterapeuta y periodista. Se desempeña como editor de cine y TV para la revista Rolling Stone en español y es docente universitario; además, es director del cineclub de la librería Casa Tomada y conferencista en Ilustre. Su amor por el cine, la música pop y rock, la televisión y los cómics raya en la locura.

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*