Overboard (Amor a la deriva) (2018)

El remake de la comedia romántica Overboard, es un producto manipulador y para nada gracioso, que hace evidente la poca exigencia del público latino actual.

Dirección: Rob Greenberg

Anna Faris, Eva Longoria, Eugenio Derbez

En 1987, la pareja conformada por Kurt Russell y Goldie Hawn protagonizó la comedia Overboard, en la que una mujer millonaria y superficial, goza al humillar a un humilde carpintero contratado por ella, para que le incluya un armario a su yate de lujo. El carpintero no llega a obtener su pago por los servicios prestados y la millonaria se embarca en un viaje de diversión. Pero un accidente la deja amnésica y el carpintero se aprovecha de la situación para convencerla de que es su esposa y para meterla de lleno en las labores de un ama de casa de clase media baja.

El fallecido director Garry Marshall (Pretty Woman) logró confeccionar una comedia ligera, pero divertida, que abordaba la diferencia de clases sociales, pero que se inclinaba por los gags fáciles y una resolución romántica predecible.

Más de treinta años después, llega a la cartelera el remake de Overboard, esta vez con una inversión de género (ahora el millonario es el hombre y el humilde es la chica) y con un ingrediente adicional: el hombre es mexicano y la chica es norteamericana. Rob Greenberg (escritor de la horripilante cinta de Eddie Murphy Meet Dave), debuta como director y nos muestra su enorme falta de preparación para esta tarea. Su película es torpe, poco graciosa, predecible y manipuladora.

Eugenio Derbez, un gran talento de la comedia televisiva mexicana (La Familia Peluche es todo un placer culposo) y protagonista de la película hablada en español más taquillera de todos los tiempos (la entrañable No Se Aceptan Devoluciones), comete un grave error interpretando al millonario Leonardo. Supuestamente Leonardo es un hombre atractivo (cosa que definitivamente Derbez no es) y el hecho de que sea mexicano, aquí no aporta gran cosa (por ejemplo, Leonardo le enseña a las niñas norteamericanas de las que se hace cargo a disfrutar de la pasta, cuando la comida mexicana supera cualquier pasta casera). Este es un personaje blanqueado, superficial, materialista y odioso, que ni el talento de Derbez logra salvar. Lo mismo se puede decir de Anna Faris, quien había tocado fondo con la ultra-pésima comedia What’s Your Number? y que ahora hunde más su carrera interpretando a Kate, una madre soltera de tres hijas que es humillada por Armando y quien se aprovecha de la amnesia de este para convertirlo en todo un “amo de casa”. Faris se ve perdida, cansada y sin nada de la chispa que alguna vez mostró en la saga de Scary Movie.

La idea de invertir el género de los personajes de la cinta original se comprende si se hubieran abordado los roles que los hombres y las mujeres cumplen en el hogar, lo cual solo se toca tangencialmente. Pero que el millonario sea mexicano (y que sea interpretado por Derbez), no cuadra para nada. Si la sexy Eva Longoria, la millonaria superficial de la serie de televisión Desperate Housewives, hubiera interpretado a la millonaria (de hecho, Longoria actúa en esta cinta como la mejor amiga de Kate), Overboard hubiera sido algo muy diferente (es más, si Faris hubiera interpretado a su pareja lesbiana de clase baja, el remake de Overboard hubiera sido mucho más interesante). Pero se nota a leguas que esta cinta se realizó para un público latino criado con la calidad cuestionable de las telenovelas actuales y que solo acude al Multiplex para buscar entretenimiento barato y descerebrado.

El público latino se ofende cuando se ve estereotipado en la pantalla grande y pequeña, pero curiosamente se divierte y acepta productos como Overboard, el cual insulta a la inteligencia, aburre de principio a fin, no tiene ningún valor cinematográfico redimible y convierte a Derbez en una mala imitación de Rob Schneider, lo cual ya es mucho decir.

Sobre André Didyme-Dôme 1649 artículos
André Didyme-Dome es psicoterapeuta y periodista. Se desempeña como editor de cine y TV para la revista Rolling Stone en español y es docente universitario; además, es director del cineclub de la librería Casa Tomada y conferencista en Ilustre. Su amor por el cine, la música pop y rock, la televisión y los cómics raya en la locura.